Carl sagan [Cosmos]
Imágen: “Foto de la estrella Altair por la NASA" Tomada de: http://es.wikipedia.org/wiki/Altair
Hace algunos años, y a punto de quedarme dormida viendo una película, uno de los protagonistas dijo una frase que me despertó: “[...] Te amo!. Escuchame, si muero mi amor te llegará como la luz de una estrella muerta”, la película no es de mis favoritas, pero no se me olvida, porque por ella me enteré de que las estrellas mueren.
Pensar que muchas de las estrellas cuya luz observamos, podrían no estar alumbrando ahora, produce una especie de nostalgia extraña, pero también es fascinante pensar en esa luz, ese brillo que nos sigue llegando: como el rastro que dejaron, como “el eco”, o como la estela que quedó de lo que brillaron, de lo que hicieron… de lo que fueron. Estamos viendo “el pasado” y pareciera el presente. Y esa nostalgia es similar al sentimiento que nos da ver un vídeo, o escuchar la voz, o ver la letra de seres que amamos o admiramos y que murieron.
En la poesía hay bastantes alusiones, y para acercarnos a lo que expresa la literatura, no sobra acercarnos a la ciencia.
Las estrellas están compuestas de hidrógeno, y de helio [surgido a causa de la acción del mismo hidrógeno]. Al paso del tiempo, el hidrógeno va disminuyendo, y siendo éste el combustible indispensable para su vida, cuando se agota, mueren.
Las más grandes, y por ende las más brillantes son las que más pronto mueren; aunque hablar de “pronto” respecto a ellas puede sonar algo extraño, ya que viven millones de años.
El hecho de que sigamos “viéndolas” aunque hayan muerto, sucede a causa de la distancia.
La velocidad de la luz es aproximadamente de 300.000 kilómetros por segundo, [299.779 kilómetros por segundo Según Isaac Asimov] pero la distancia existente entre las estrellas y nosotros es tan enorme, que la luz que emitieron, algunas hace millones de años, es la que nosotros vemos.
Las estrellas están compuestas de hidrógeno, y de helio [surgido a causa de la acción del mismo hidrógeno]. Al paso del tiempo, el hidrógeno va disminuyendo, y siendo éste el combustible indispensable para su vida, cuando se agota, mueren.
Las más grandes, y por ende las más brillantes son las que más pronto mueren; aunque hablar de “pronto” respecto a ellas puede sonar algo extraño, ya que viven millones de años.
El hecho de que sigamos “viéndolas” aunque hayan muerto, sucede a causa de la distancia.
La velocidad de la luz es aproximadamente de 300.000 kilómetros por segundo, [299.779 kilómetros por segundo Según Isaac Asimov] pero la distancia existente entre las estrellas y nosotros es tan enorme, que la luz que emitieron, algunas hace millones de años, es la que nosotros vemos.
En “El mundo de Sofia”, Jostein Gaarder toca el tema de “La gran explosión” y lo enriquece con muchas otras explicaciones accesorias, aquí transcribo apenas un fragmento del aparte en el que Gaarder ilustra lo relacionado con distancia y tiempo, que nos permite entender mejor lo que mencioné:
“Cuándo dirigímos nuestra mirada a una estrella de la Vía láctea que esté a 50.000 años luz de nuestro propio planeta, entonces miramos 50.000 años hacía atrás en el tiempo.
-Este pensamiento es demasiado grande para una cabecita tan pequeña como la mía.
-La única manera que tenemos de mirar hacía el universo es mirando hacía atrás en el tiempo. No sabremos nunca como es aquello en el universo. Sólo sabemos cómo era. Cuando miramos una estrella que está a miles de años luz, viajamos en realidad miles de años hacía atrás en la historia del universo.
-Es completamente inconcebible.
-Pero todo lo que vemos llega a nuestro ojo como ondas de luz. Y estas ondas emplean tiempo en viajar por el espacio. Podemos hacer una comparación con los truenos, siempre escuchamos los truenos unos instantes después de ver el rayo. Eso se debe a que las ondas del sonido se mueven más lentamente que las ondas de luz. Cuando oigo un trueno, estoy oyendo el ruido de algo que ocurrió hace un rato. Lo mismo ocurre con las estrellas. Cuando miro una estrella que se encuentra a miles de años luz de nosotros, veo el “trueno” de un suceso que se encuentra miles de años hacía atrás en el tiempo.”
De “Cosmos”, tomé éste texto en el que Carl Sagan narra la historia de una estrella que explotó:
“El 4 de junio del año 1054, astrónomos chinos anotaron la presencia de lo que ellos llamaban estrella invitada en la constelación de Tauro, el Toro. Una estrella no vista nunca hasta entonces se hizo más brillante que cualquier otra estrella del cielo.
A medio mundo de distancia, en el suroeste norteamericano, había entonces una cultura superior, rica en tradición astronómica, que también presenció esta nueva y brillante estrella. 7 La datación con el carbono 14 de los restos de un fuego de carbón nos permiten saber que a mediados del siglo once algunos anasazi, antecesores de los actuales hopi, vivían bajo una plataforma saliente en el actual Nuevo Méjico. Parece que uno de ellos dibujó en la pared, protegida por el saliente de la intemperie, un dibujo de la nueva estrella. Su posición en relación a la luna creciente habría sido exactamente tal como la dibujaron. Hay también la impresión de una mano, quizás la firma del artista.
Esta estrella notable, a 5 000 años luz de distancia, se denomina actualmente la Supernova Cangrejo, porque a un astrónomo, siglos más tarde, le pareció ver, inexplicablemente, un cangrejo cuando observaba los restos de la explosión a través de su telescopio. La Nebulosa Cangrejo está formada por los restos de una estrella de gran masa que autoexplotó. La explosión se vio en la Tierra a simple vista durante tres meses. Era fácilmente visible a plena luz del día, y con su luz se podía leer de noche."
…Y si la astronomía es como poesía... de la poesía a la astronomía, también hay un solo paso. Para la muestra las preguntas de José Asunción Silva en su poema “Estrellas que entre lo sombrío”:
“¡estrellas, luces pensativas!
¡estrellas, pupilas inciertas!
¿Por qué os calláis si estáis vivas
Y por que alumbráis si estáis muertas?”...
[Fragmento].
“Cuándo dirigímos nuestra mirada a una estrella de la Vía láctea que esté a 50.000 años luz de nuestro propio planeta, entonces miramos 50.000 años hacía atrás en el tiempo.
-Este pensamiento es demasiado grande para una cabecita tan pequeña como la mía.
-La única manera que tenemos de mirar hacía el universo es mirando hacía atrás en el tiempo. No sabremos nunca como es aquello en el universo. Sólo sabemos cómo era. Cuando miramos una estrella que está a miles de años luz, viajamos en realidad miles de años hacía atrás en la historia del universo.
-Es completamente inconcebible.
-Pero todo lo que vemos llega a nuestro ojo como ondas de luz. Y estas ondas emplean tiempo en viajar por el espacio. Podemos hacer una comparación con los truenos, siempre escuchamos los truenos unos instantes después de ver el rayo. Eso se debe a que las ondas del sonido se mueven más lentamente que las ondas de luz. Cuando oigo un trueno, estoy oyendo el ruido de algo que ocurrió hace un rato. Lo mismo ocurre con las estrellas. Cuando miro una estrella que se encuentra a miles de años luz de nosotros, veo el “trueno” de un suceso que se encuentra miles de años hacía atrás en el tiempo.”
De “Cosmos”, tomé éste texto en el que Carl Sagan narra la historia de una estrella que explotó:
“El 4 de junio del año 1054, astrónomos chinos anotaron la presencia de lo que ellos llamaban estrella invitada en la constelación de Tauro, el Toro. Una estrella no vista nunca hasta entonces se hizo más brillante que cualquier otra estrella del cielo.
A medio mundo de distancia, en el suroeste norteamericano, había entonces una cultura superior, rica en tradición astronómica, que también presenció esta nueva y brillante estrella. 7 La datación con el carbono 14 de los restos de un fuego de carbón nos permiten saber que a mediados del siglo once algunos anasazi, antecesores de los actuales hopi, vivían bajo una plataforma saliente en el actual Nuevo Méjico. Parece que uno de ellos dibujó en la pared, protegida por el saliente de la intemperie, un dibujo de la nueva estrella. Su posición en relación a la luna creciente habría sido exactamente tal como la dibujaron. Hay también la impresión de una mano, quizás la firma del artista.
Esta estrella notable, a 5 000 años luz de distancia, se denomina actualmente la Supernova Cangrejo, porque a un astrónomo, siglos más tarde, le pareció ver, inexplicablemente, un cangrejo cuando observaba los restos de la explosión a través de su telescopio. La Nebulosa Cangrejo está formada por los restos de una estrella de gran masa que autoexplotó. La explosión se vio en la Tierra a simple vista durante tres meses. Era fácilmente visible a plena luz del día, y con su luz se podía leer de noche."
…Y si la astronomía es como poesía... de la poesía a la astronomía, también hay un solo paso. Para la muestra las preguntas de José Asunción Silva en su poema “Estrellas que entre lo sombrío”:
“¡estrellas, luces pensativas!
¡estrellas, pupilas inciertas!
¿Por qué os calláis si estáis vivas
Y por que alumbráis si estáis muertas?”...
[Fragmento].
Pero mis tres estrellas favoritas de la poesía son, una a la que Robert Desnos le encuentra un parecido único:
“Una estrella que muere se parece a tus labios
que azulean como el vino derramado sobre el mantel”…
[Fragmento de el poéma “La idea fija”]
La otra está detrás de cada espejo, y la encontró el genial Federico Garcia Lorca:
[Fragmento de el poéma “La idea fija”]
La otra está detrás de cada espejo, y la encontró el genial Federico Garcia Lorca:
“Detrás de cada espejo
Hay una estrella muerta
Y un arco iris niño
Que duerme”
[Fragmento del poema “Capricho”]
Hay una estrella muerta
Y un arco iris niño
Que duerme”
[Fragmento del poema “Capricho”]
Y ésta de Eduardo Carranza:
“Ya sé que existo porque tú me sueñas.
Moriré de repente si me olvidas.
Tal vez me vean vivir en apariencia,
Como la luz de las estrellas muertas”
[Fragmento de el poema “Tema de sueño y vida”]
*[La película citada al inicio es 27 missing kisses]
http://es.wikipedia.org/wiki/Estrella
http://www.youtube.com/watch?v=VQh5pt70v6g&feature=PlayList&p=909E982A31566161&playnext=1&playnext_from=PL&index=58“Ya sé que existo porque tú me sueñas.
Moriré de repente si me olvidas.
Tal vez me vean vivir en apariencia,
Como la luz de las estrellas muertas”
[Fragmento de el poema “Tema de sueño y vida”]
*[La película citada al inicio es 27 missing kisses]
http://es.wikipedia.org/wiki/Estrella
http://www.youtube.com/watch?v=Ag4aMkSgVW4
4 comentarios:
Gracias infinitas por el post. Llevo tiempo buscando una explicación poética de tan maravilloso fenómeno, y la he encontrado. Mil gracias
Maus, las mismas gracias a ti, por la visita y por las palabras.
Si... es maravilloso como dices.
Me alegra mucho ser el puente que te proporcionó la explicación.
Excelente post; me encantaron también las citas que tomaste. Guardado tu blog para leerte más adelante.
Julio, me alegra que te haya gustado... Que bueno que vuelvas.
Un abrazo.
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