Del griego kalós: bella,
éidos: Imagen,
scopéo: observar
Caleidoscopio o Calidoscopio: Observar una bella imagen.
Al parecer el origen del caleidoscopio se remonta al antiguo Egipto, pero quién le dio forma tal como lo conocemos, fué el físico escocés David Brewster, quién en 1813 lo dio a conocer y patentó su invención.
La belleza y diversidad de imágenes que crea, lo han constituido en elemento inspirador de metáforas, poemas, canciones, etc., así en 1818, recién conocido en Rusia, el fabulista A. Izmailov, fascinado con él, escribió en la Revista Blagonamerenni:
“Leí un anuncio del caleidoscopio y conseguí uno de estos maravillosos aparatos:
Miro, y, ¿Qué ven mis ojos?
En distintas figuras y estrellas,
Zafiros, rubíes, topacios
Y esmeraldas, y diamantes,
Y amatistas, y perlas,
Y nácar, y todo, ¡de repente!
Y en cuanto la mano muevo,
Mis ojos ven algo nuevo”
También el físico Yakov Perelman hizo alusión a él en su libro “Física Recreativa” de 1936: “Los océanos se secarían y las cadenas montañosas desaparecerían, antes de que pudiéramos acabar de ver todos los dibujos, que de forma tan maravillosa se encierran en éste pequeño juguete; porque para efectuar todas las combinaciones posibles se necesitarían, por lo menos, 500 000 millones de años. Es decir, ¡más de quinientos millones de milenios habría que estar girando nuestro caleidoscopio, para ver todos los dibujos […]”.
Esa característica de permitir tan rápida y variada modificación de las formas ofrecidas, que aparece tan pronunciada en él y mucho más evidente e instantánea que en muchos elementos, de seguro habría encantado a Heráclito. Y sin duda debió encantar a un “heracliteano” como J. L. Borges, considerando que fué éste uno de los elementos que sirvió de inspiración al escritor argentino para crear “El Aleph”. Y evidentemente también debió fascinar la fantástica imaginación de John Lennon quién en 1967 inspirado en un dibujo de su hijo Julian, "le puso" ojos de caleidoscopio a “Lucy”…
“Picture yourself in a boat on a river,
With tangerine trees and marmalade skies
Somebody calls you, you answer quite slowly,
A girl with kaleidoscope eyes. [...]”
With tangerine trees and marmalade skies
Somebody calls you, you answer quite slowly,
A girl with kaleidoscope eyes. [...]”
“Imagínate en una barca en un río,
con mandarinos y cielos de mermelada.
alguien te llama, respondes despacio,
alguien te llama, respondes despacio,
una chica con ojos de caleidoscopio. […]"
The Beatles,“Lucy in the sky with diamonds"
J. L. Borges lo incluyó en varios de sus escritos. Entre ellos “Las causas”:
“[…] Cada gota de agua en la clepsidra,
el ajedrez, la brújula incesante
El eco del reloj en la memoria
Las formas de la nube en el desierto
Cada arabesco del calidoscopio
Cada remordimiento y cada lágrima
eran precisas todas esas cosas
Para que nuestras manos se encontraran.”
También escribió en Paradiso, XXXI, 108:
“[…] Perdimos esos rasgos, como puede perderse un número mágico, hecho de cifras habituales; como se pierde para siempre para siempre una imagen en el calidoscopio. […]”
“[…] Perdimos esos rasgos, como puede perderse un número mágico, hecho de cifras habituales; como se pierde para siempre para siempre una imagen en el calidoscopio. […]”
1 comentario:
!Qué bueno leer nuevamente sus textos, Paolita! Ëste, encantador, provocativo.
dago
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