que te fue dado andar sobre la tierra,
digo que has muerto."
Fragmento de "Epílogo" [J. L. Borges]
fotografía: “Amber hourglass” By: Brooks Elliott
Hay cosas, eventos en nuestras vidas de los que sabemos la exacta cifra. Otras cifras las tenemos totalmente ignoradas, olvidadas o perdídas. Pero, ¿Es posible qué hasta de las cosas aparentemente insignificantes que hacemos, en algún lugar se lleve la cuenta o quede el registro?. Mas aún, ¿Acaso hay una serie de eventos que debe ocurrir antes de que se produzca un hecho con el que no existe una conexión lógica?
La fantástica imaginación de Borges dibujó la idea. A mi me recuerda en algo aquella precisa cifra anunciada de el cantar de un gallo, que tristemente confirmó a uno de los hombres más fieles una negación predicha.
De manera romántica “la espera” contiene la idea:
"Antes que suene el presuroso timbre
Y abran la puerta y entres, oh esperada
Por la ansiedad, el universo tiene
Que haber ejecutado una infinita
Serie de actos concretos. Nadie puede
Computar ese vértigo, la cifra
De lo que multiplican los espejos,
De sombras que se alargan y regresan,
De pasos que divergen y convergen.
La arena no sabría numerarlos.
[En mi pecho, el reloj de sangre mide
El temeroso tiempo de la espera.]
Antes que llegues,
Un monje tiene que soñar con un ancla,
Un tigre tiene que morir en Sumatra,
Nueve hombres tienen que morir en Borneo".
J. L. Borges
De manera romántica “la espera” contiene la idea:
"Antes que suene el presuroso timbre
Y abran la puerta y entres, oh esperada
Por la ansiedad, el universo tiene
Que haber ejecutado una infinita
Serie de actos concretos. Nadie puede
Computar ese vértigo, la cifra
De lo que multiplican los espejos,
De sombras que se alargan y regresan,
De pasos que divergen y convergen.
La arena no sabría numerarlos.
[En mi pecho, el reloj de sangre mide
El temeroso tiempo de la espera.]
Antes que llegues,
Un monje tiene que soñar con un ancla,
Un tigre tiene que morir en Sumatra,
Nueve hombres tienen que morir en Borneo".
J. L. Borges
Por la misma senda, Borges nos hace pensar si acaso habrá cifras predeterminadas para los actos que hémos de ejecutar en vida, y más aún, excava la posibilidad de que vigente aún la cifra de tiempo de vida, hayamos ya agotado otras cifras, o que el número tope de ciertos actos anteceda el tope de aquella crucial cifra.
“No hay un segundo que no esté royendo una serie. Agotarás la cifra que corresponde al sabor del jengibre y seguirás viviendo. Agotarás la cifra que corresponde a la lisura del cristal y seguirás viviendo unos dias. Agotarás la cifra de los latidos que te han sido fijados y entonces habrás muerto”.
Fragmento de: "Sueño soñado en Edimburgo" [J. L. Borges]
“No hay un segundo que no esté royendo una serie. Agotarás la cifra que corresponde al sabor del jengibre y seguirás viviendo. Agotarás la cifra que corresponde a la lisura del cristal y seguirás viviendo unos dias. Agotarás la cifra de los latidos que te han sido fijados y entonces habrás muerto”.
Fragmento de: "Sueño soñado en Edimburgo" [J. L. Borges]
1 comentario:
Dios mueve al jugador y este a la pieza.
¿Qué Dios detrás de Dios la trama empieza?
borges
Publicar un comentario